Cruz Azul escribió una página dorada en su historia al golear 5-0 a Vancouver Whitecaps y proclamarse campeón de la Concacaf Champions Cup 2025. El contundente triunfo se vivió la noche del 1 de junio en el Estadio Olímpico Universitario de la Ciudad de México, donde la afición celeste celebró a lo grande el séptimo título internacional de La Máquina. Este logro no solo reafirma la grandeza del club, sino que también le otorga el pase al Mundial de Clubes 2029 y a la Copa Intercontinental 2025, además de un premio económico millonario.
Un partido histórico: Cruz Azul impone su ley en la final de la Concachampions 2025
Desde el pitazo inicial, Cruz Azul mostró superioridad absoluta sobre el conjunto canadiense, que llegaba con una racha de 15 partidos invicto. Sin embargo, la presión y el fútbol ofensivo de los dirigidos por Vicente Sánchez fueron demasiado para los Whitecaps, que nunca encontraron respuesta ante el vendaval celeste.
El marcador se abrió apenas al minuto 8, cuando Ignacio Rivero aprovechó una jugada colectiva para poner el primer tanto. El dominio continuó y al 28’, el argentino Lorenzo Faravelli firmó el 2-0 con un potente disparo desde fuera del área. La fiesta en las tribunas aumentó cuando, al 37’, Ángel Sepúlveda anotó el tercero, consolidando el control total del partido antes del descanso.
Antes de finalizar la primera mitad, el polaco Mateusz Bogusz se sumó a la lista de goleadores con el 4-0, mientras que Sepúlveda, en el minuto 50, selló la goleada con su segundo tanto de la noche. El doblete de Sepúlveda no solo fue clave para la victoria, sino que le permitió consagrarse como máximo goleador del torneo con nueve anotaciones.
Cruz Azul iguala récords y asegura su lugar en la élite internacional
Con este triunfo, Cruz Azul suma siete títulos de Concacaf, igualando al América como los clubes más ganadores en la historia del certamen. La victoria también significa el regreso de La Máquina a la cima continental tras once años de sequía en este torneo, reafirmando el dominio de los equipos mexicanos en la región.
Además del prestigioso trofeo, el club cementero obtuvo recompensas deportivas y económicas de alto impacto. El campeonato le otorga el boleto directo al Mundial de Clubes 2029, donde competirá con los mejores equipos del planeta bajo el nuevo formato de la FIFA. También participará en la Copa Intercontinental 2025, torneo que reúne a los campeones de las seis confederaciones y que se disputará en diciembre. A esto se suma un premio de cinco millones de dólares, reflejo del crecimiento e importancia de la competencia.
La afición y el Estadio Olímpico Universitario: testigos de una noche inolvidable
El Estadio Olímpico Universitario lució repleto de camisetas azules y fue escenario de una fiesta inolvidable. Los cánticos de “Olé, olé, olé, campeón, campeón” retumbaron en las gradas, mientras la ola recorría el estadio y el nombre de Vicente Sánchez era coreado por los aficionados, reconociendo su labor en el banquillo en lo que fue su último partido como técnico celeste.
Por su parte, Vancouver Whitecaps, que llegaba como líder de la Conferencia Oeste de la MLS y con una sólida racha, no logró generar peligro real y se vio superado en todos los sectores del campo. El equipo canadiense apenas pudo contener el vendaval ofensivo de La Máquina, que no necesitó tiempos extras para definir la final y se llevó el trofeo en tiempo regular.
Un triunfo que trasciende: Cruz Azul mira al futuro con ambición
La goleada 5-0 sobre Vancouver Whitecaps no solo es una victoria deportiva, sino un mensaje claro de la fortaleza y el prestigio de Cruz Azul a nivel internacional. El club cementero se consolida como un referente del fútbol mexicano y de la Concacaf, con una generación de jugadores que supo responder a la exigencia de una final y regalarle a su afición una noche para la historia.
Ahora, con el pase asegurado a competencias globales y una plantilla motivada, Cruz Azul se prepara para afrontar nuevos retos en el panorama internacional. La afición celeste puede soñar en grande: La Máquina vuelve a rugir en la cima del continente, lista para conquistar el mundo.
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