Una investigación coordinada entre la Secretaría de Hacienda, el Gabinete de Seguridad y la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) ha detectado una red de 13 casinos que operaban presuntamente como centros de lavado de dinero en al menos ocho estados del país: Jalisco, Nuevo León, Sinaloa, Sonora, Baja California, Estado de México, Chiapas y la Ciudad de México.

