La presidenta Claudia Sheinbaum hizo un llamado público al senador Adán Augusto López Hernández para que explique su relación con Hernán Bermúdez Requena, exsecretario de Seguridad de Tabasco, quien actualmente es investigado por presuntos vínculos con el grupo criminal La Barredora, célula asociada al Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
El escándalo ha desatado un intenso debate político, marcado por acusaciones de la oposición y una creciente presión mediática sobre el coordinador de la bancada de Morena en el Senado, quien fuera gobernador de Tabasco entre 2019 y 2023 y tuvo a Bermúdez al frente de la seguridad estatal durante su mandato. Este caso adquiere relevancia nacional por el impacto que podría tener en la imagen del partido oficialista y en la percepción pública sobre la transparencia y la rendición de cuentas en el gobierno federal.
La petición de Claudia Sheinbaum no se hizo en tono de imposición; la mandataria aclaró que se trata de una recomendación, ya que considera fundamental que la ciudadanía conozca la versión de Adán Augusto López sobre los hechos, principalmente en torno al desempeño de Bermúdez durante la administración estatal y sobre cómo fue el proceso de conocimiento y respuesta ante las acusaciones en su contra.
Sheinbaum recalcó que las investigaciones sobre Bermúdez Requena continúan avanzando y que el gobierno federal no protegerá a ningún funcionario, dejando claro que la fiscalía es la instancia encargada de establecer responsabilidades y que el proceso debe basarse en pruebas, no en suposiciones. Sin embargo, subrayó que sería “muy bueno” que el senador brindara su relato para que la gente pueda valorar el trabajo realizado durante su gestión, especialmente en materia de seguridad, periodo en el que, según la presidenta, los homicidios en Tabasco disminuyeron de manera significativa.
El asunto ha cobrado mayor fuerza luego de que se confirmara que Hernán Bermúdez Requena, quien fue designado por el propio Adán Augusto López como secretario de Seguridad de Tabasco en diciembre de 2019, está prófugo de la justicia desde enero de 2025, tras girarse una orden de aprehensión en su contra por presuntamente proteger al grupo criminal La Barredora. Bermúdez abandonó el país y tiene una ficha roja de Interpol, lo que ha aumentado la presión sobre el entorno político del exgobernador.
El PAN, principal partido de oposición, ha solicitado la creación de una comisión legislativa especial para investigar los presuntos nexos entre López Hernández y el crimen organizado, además de promover una denuncia formal contra el senador, argumentando que, según versiones de sus asesores, Adán Augusto estaba al tanto de las investigaciones contra Bermúdez desde 2019, cuando el Ejército indagaba una red de tráfico ilegal de combustible en la entidad.
Frente a la polémica, Adán Augusto López Hernández ha mantenido un perfil bajo y no se ha pronunciado públicamente sobre el caso, lo que contrasta con la actitud de los senadores de Morena, quienes han emitido un comunicado expresando “respaldo político, institucional y humano” a su coordinador.
Mientras tanto, en redes sociales y en la opinión pública, las comparaciones con el caso de Genaro García Luna, exsecretario de Seguridad Pública federal sentenciado en Estados Unidos por nexos con el narcotráfico, han incrementado el escrutinio sobre la transparencia en el manejo de la seguridad pública y la responsabilidad de los mandos superiores ante la actuación de sus colaboradores.
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