La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, descartó la posibilidad de una reforma fiscal en el corto plazo, argumentando que aún existen muchas áreas de oportunidad para reducir prácticas de corrupción que permitan aumentar los ingresos del gobierno federal. En una conferencia de prensa, Sheinbaum reconoció que durante el sexenio del presidente Andrés Manuel López Obrador se han logrado avances significativos, pero subrayó que todavía hay oportunidades para mejorar la recaudación fiscal sin necesidad de modificar la ley.
Sheinbaum destacó que en 2024 se logró incrementar los ingresos federales en 400 mil millones de pesos en comparación con 2023, y esto se logró sin implementar una reforma fiscal. “Todavía hay áreas de oportunidad para obtener mayores ingresos y lo vamos a trabajar primero antes de pensar en la reforma fiscal”, afirmó. La presidenta enfatizó que es fundamental erradicar la corrupción como parte de la estrategia para mejorar las finanzas públicas.
Durante su intervención, la mandataria hizo referencia a reformas ya implementadas, como aquellas que permiten que las actividades de las factureras puedan derivar en prisión preventiva. Sin embargo, también mencionó que el Poder Judicial a menudo otorga amparos indiscriminadamente a estas empresas, lo que perpetúa privilegios y evita que se cumpla con las obligaciones fiscales. “Todos tenemos que pagar impuestos… Debe ser sacado quiénes defraudan no solo al fisco sino al pueblo de México”, enfatizó.
Cuando se le preguntó sobre la posibilidad de una reforma fiscal en 2025, Sheinbaum respondió que ya se había presentado la ley de ingresos y que no se estaba considerando trabajar en una reforma para 2026. “Primero hay que seguir en esta tarea (de ampliar ingresos) antes de pensar en aumentar tasas de impuestos”, reiteró, dejando claro que por el momento no se contempla un cambio en la política fiscal.
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