El equipo de la presidenta electa Claudia Sheinbaum acudió a la Cámara de Diputados para afinar los detalles de la toma de posesión que se llevará a cabo el próximo 1 de octubre. En una reunión con la secretaria general de la Cámara Baja, Graciela Báez, se definieron aspectos cruciales del protocolo y la logística del evento, incluyendo la entrada de la mandataria electa y sus invitados internacionales.
Báez destacó la importancia de que el evento sea impecable, no solo en honor a Sheinbaum como la primera mujer en asumir la presidencia de México, sino también por la imagen del país que se proyectará al mundo. Se revisaron áreas específicas para prensa y comitiva, asegurando que todo esté preparado para el día del evento.
La seguridad es una prioridad, con 250 elementos resguardando las instalaciones, apoyados por personal de la Guardia Nacional y próximamente por la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena). Estas medidas incluyen vallas provisionales que serán reemplazadas por otras más robustas en los próximos días. La delegación de la Embajada de Estados Unidos también inspeccionó las instalaciones para garantizar un evento seguro.
Además, se han confirmado cinco ambulancias y se gestionan dos más para atender cualquier contingencia médica. Un equipo compuesto por 42 médicos y paramédicos estará disponible durante el evento. Los accesos a la Cámara están controlados y resguardados por elementos de seguridad, mientras se realizan trabajos de remozamiento y limpieza en el recinto.
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