El gobierno de Veracruz anunció la disolución de la Fuerza Civil, una corporación policiaca de élite, tras un violento operativo en Totalco que dejó un saldo de dos muertos. La medida fue anunciada casi a la medianoche del lunes, a casi diez años de la creación de esta fuerza especial, sin que hasta el momento haya policías detenidos por el incidente.
El operativo en cuestión tenía como objetivo liberar la carretera Perote-Puebla, que había sido bloqueada por una manifestación de campesinos. Según el comunicado oficial, «Esta medida será llevada a cabo en los tiempos que no interfieran en las investigaciones que las fiscalías realizan actualmente». La Fuerza Civil será reemplazada por un mando único operativo desde la Subsecretaría de Operaciones de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP).
Los hechos que llevaron a esta decisión ocurrieron el 20 de junio, cuando dos personas perdieron la vida y un número indeterminado resultaron heridas durante el violento desalojo de manifestantes en las afueras de la fábrica de alimentos Granjas Carroll. Los pobladores de Perote y municipios aledaños de Puebla protestaban contra el presunto acaparamiento de agua por parte de la empresa, que según denuncian, causa desabasto en las comunidades y daños al medio ambiente.
Durante el operativo de desalojo, elementos antimotines de la Fuerza Civil lanzaron gas lacrimógeno y dispararon varias veces al aire, acciones que fueron captadas en video por algunos de los ciudadanos presentes. En un trágico giro de los acontecimientos, agentes de la Fuerza Civil dispararon contra un tractor en el que se encontraban los hermanos Jorge y Alberto Cortina Vázquez, de 37 y 29 años, quienes posteriormente fallecieron a causa de sus heridas.
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