La Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados aprobó, sin modificaciones, la Ley de Ingresos de la Federación 2025, que prevé ingresos totales por 9.3 billones de pesos, incluyendo un endeudamiento público interno de 1.58 billones de pesos y externo de 15,500 millones de dólares. El dictamen fue avalado con 22 votos a favor de Morena, sus aliados y Movimiento Ciudadano, mientras que el PAN y PRI votaron en contra con 10 votos, cuestionando las proyecciones económicas del gobierno.
El paquete fiscal para 2025 se sustenta en estimaciones como un crecimiento económico de entre 2% y 3% del PIB, un tipo de cambio promedio de 18.5 pesos por dólar, y un precio del petróleo de exportación fijado en 57.8 dólares por barril, con una producción diaria proyectada de 1.89 millones de barriles. Sin embargo, legisladores opositores, como el panista Guillermo Anaya, señalaron dudas sobre la viabilidad de estas cifras y advirtieron sobre posibles impactos negativos en estados y municipios si las metas no se cumplen.
La sesión también incluyó la aprobación de la Ley Federal de Derechos, que contempla incrementos en tarifas aplicadas al sector minero, como el derecho especial que sube del 7.5% al 8.5%, y el derecho extraordinario que pasa del 0.5% al 1% sobre ingresos por la venta de metales preciosos. Además, se incrementaron los cobros por servicios migratorios y aeroportuarios, lo que generó críticas por parte de algunos legisladores.
El diputado panista Federico Döring reprochó la falta de diálogo entre la Secretaría de Hacienda y los legisladores, calificando como insuficiente el tiempo dedicado a discutir un presupuesto tan amplio. Por su parte, el coordinador del PT, Reginaldo Sandoval, defendió las proyecciones económicas del gobierno y destacó que el tope de deuda pública representa una reducción respecto a lo aprobado en 2024.
El dictamen fue enviado a la Mesa Directiva para ser discutido en el pleno este martes. Aunque cuenta con el respaldo mayoritario del bloque oficialista, se anticipa un intenso debate debido a las divisiones entre las bancadas sobre los cálculos económicos y las prioridades presupuestarias para el próximo año.
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