Por Diario Patria
En medio del proceso histórico para renovar al Poder Judicial en México, el nombre de David Alejandro Aquino Cruz destaca por su trayectoria sólida, su ética sin tacha y su visión profundamente humana de la justicia. Con más de 15 años de experiencia en el Poder Judicial del Estado de México, ha sido archivista, proyectista, secretario, y hoy funge como juez penal de control, cargo que ahora busca consolidar a través del voto ciudadano.
Originario del Estado de México, Aquino habla con convicción, pero también con sencillez. En entrevista con Diario Patria, compartió no solo su visión profesional, sino también su rutina emocional antes de una audiencia, su afición por los tacos y el valor que le da a representar a sus raíces cada vez que viste la toga.
⸻
De archivista a juez: una carrera sin atajos
David Alejandro comenzó su camino judicial en 2008 como archivista. Desde entonces, ha recorrido todos los escalones institucionales, construyendo una carrera basada en disciplina, preparación académica y trabajo constante.
“Mi visión ha cambiado desde el archivo hasta la sala de audiencias. Hoy sé que detrás de cada expediente hay familias, historias, vidas que pueden ser marcadas para siempre. Por eso la sensibilidad humana es indispensable”, afirma.
⸻
Una toga cargada de historia personal
Para David, la responsabilidad de juzgar no se ejerce solo desde la técnica jurídica, sino desde el alma. Antes de cada audiencia, se imagina acompañado por sus padres, sus abuelos, sus hermanos. “No voy solo. Llevo conmigo a mis ancestros. Eso me da fuerza y serenidad para tomar decisiones difíciles”.
La frase lo dice todo: Aquino no entra solo a la sala. Lo hace con la memoria de quienes lo formaron y con el compromiso de quien sabe que cada sentencia tiene un impacto real en la vida de las personas.
⸻
Texcoco y la interculturalidad como desafío
Postulado para el Distrito Judicial XlV de Texcoco en el Estado de México, David conoce la complejidad de una región donde convergen personas originarias de Oaxaca, Puebla y otras partes del país. “Es clave reconocer la diversidad cultural. Si una persona pertenece a una comunidad indígena, debemos hacer ajustes razonables en el procedimiento para garantizar que su derecho a ser escuchada se cumpla”, explica.
Su formación incluye enfoque en derechos humanos, perspectiva de género, justicia para adolescentes e interculturalidad. Todo eso, dice, “es como ponerse una lupa especial para entender no solo el hecho delictivo, sino el contexto que lo rodea”.
⸻
Aquino: un apellido que ya es eslogan
Aunque se define como una persona seria en el juzgado, no es ajeno al humor. En redes, ha adoptado su apellido como eslogan y chiste interno: “Aquí no hay corrupción”, “Aquí no pasa eso”, “Aquino es correcto”. Así, convierte una identidad en una forma de comunicar cercanía, transparencia y confianza.
⸻
Cada audiencia es un reto (y a veces se celebra con tacos)
Cuando recuerda el momento más desafiante de su carrera, no duda: su primera audiencia por un caso de secuestro, con sala llena y abogados experimentados. La presión era máxima. “Fue un momento clave. Tomé la decisión y apelaron, pero la sala confirmó mi resolución. Eso me dio la certeza de que lo estaba haciendo bien”, cuenta.
Y cuando hay un día complicado o un resultado favorable, Aquino tiene claro su premio: “Soy amante de los tacos, desde los de pastor hasta los de carne asada. Son mi recompensa, mi motivación sencilla”.
⸻
Una reforma que necesita confianza… y participación
David Alejandro Aquino está convencido de que la participación ciudadana en esta reforma judicial es un paso decisivo para cambiar la justicia en México. “Esta reforma es una realidad. No dejemos que solo unos pocos decidan. El voto de cada persona suma, no solo para elegir a un candidato, sino para fortalecer el proceso democrático.”
Su mensaje es directo: “El poder está en nuestras manos. El 1º de junio, salgamos a votar. Conozcan los perfiles, comparen trayectorias, ejerzan su derecho al sufragio efectivo. Porque cada juez que se elige impacta la vida de muchas personas.”
Deja una respuesta