El peso mexicano ha mostrado una notable recuperación en los últimos días, rompiendo la barrera de las 18 unidades por dólar. Este lunes 24 de junio, la moneda nacional cerró en 17.93 unidades por dólar, marcando su mejor nivel en dos semanas. Este fortalecimiento se debe a varios factores económicos y políticos que han influido en el mercado cambiario.
Uno de los principales impulsores de esta apreciación ha sido el dato de inflación en la primera quincena de junio, que resultó ser más bajo de lo esperado. Este indicador ha generado confianza en los mercados, ya que sugiere que la economía mexicana podría estar estabilizándose. Además, la política monetaria de la Reserva Federal de los Estados Unidos, que ha mantenido las tasas de interés sin cambios, también ha jugado un papel crucial en este escenario.
Los mercados han ganado confianza en la economía mexicana, lo que se refleja en la apreciación del peso. Según datos de Banco Base, el tipo de cambio interbancario se ubicó en 18.03 unidades por dólar al inicio de la jornada, pero cerró en 17.93 unidades, lo que representa una apreciación significativa. Este comportamiento positivo del peso se ha mantenido durante tres jornadas consecutivas, lo que refuerza la tendencia alcista.
Diversos analistas coinciden en que el precio del petróleo y la situación económica de México también han influido en esta recuperación. El precio del petróleo, una de las principales exportaciones del país, ha mostrado estabilidad en las últimas semanas, lo que ha beneficiado al peso. Por otro lado, aunque la economía mexicana ha mostrado signos de desaceleración, las expectativas de una recuperación gradual han contribuido a la confianza en la moneda nacional.
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