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AHMSA se Declara en Quiebra y Busca Inversionistas para Reactivarse

Altos Hornos de México (AHMSA), una de las principales siderúrgicas del país ubicada en Monclova, Coahuila, ha anunciado que será declarada en quiebra. La declaración será emitida por Ruth Haggi Huerta, titular del juzgado segundo de distrito, tras concluir la última prórroga de la etapa de conciliación en su proceso de concurso mercantil. Este paso marca un momento crítico para la empresa que fue propiedad de Alonso Ancira Elizondo hasta hace algunos años.

En esta nueva fase, el Instituto Federal de Especialistas en Concursos Mercantiles (Ifecom) designará un síndico que asumirá el control de AHMSA. La administración actual, asesorada por Rothschild & Co y bajo la supervisión del conciliador Víctor Manuel Aguilera, está en busca de inversionistas tanto nacionales como extranjeros para capitalizar la empresa y reanudar operaciones lo antes posible en Monclova. Se están llevando a cabo conversaciones con siete potenciales inversionistas y siderúrgicas, dos de los cuales ya han realizado visitas de debida diligencia.

La siderúrgica necesita aproximadamente 900 millones de dólares para enfrentar sus adeudos y reactivar sus operaciones. De esta cantidad, al menos 650 millones deberán destinarse a pagar deudas con la Comisión Federal de Electricidad (CFE), Petróleos Mexicanos (Pemex), trabajadores y acreedores. La empresa ha dejado de pagar sueldos a sus trabajadores desde hace al menos un año y siete meses, lo que ha afectado significativamente a la economía local de Monclova y regiones cercanas.

AHMSA ha sido un pilar económico en la región, proporcionando 17 mil empleos directos y siendo fundamental para más del 50% de la población de Monclova y zonas aledañas. La empresa agradece el apoyo y paciencia de sus ex trabajadores, obreros y empleados y reafirma su compromiso de llevar a cabo este proceso de manera transparente y en estricto cumplimiento de la normativa legal correspondiente.

La crisis de AHMSA se ha visto agravada por problemas económicos y compromisos financieros, incluyendo un pago pendiente de 216 millones de dólares a Pemex relacionado con acciones penales contra Ancira Elizondo. El futuro de la siderúrgica depende ahora de la capacidad de atraer inversión y reestructurar sus finanzas para preservar empleos y revitalizar la economía local.

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