El Senado de Argentina aprobó el jueves las reformas económicas y tributarias impulsadas por el presidente Javier Milei, en su primera victoria legislativa desde que asumió el poder hace seis meses. Los senadores aprobaron en general los dos proyectos oficialistas, pero durante la votación modificaron y eliminaron algunos puntos considerados vitales para el gobierno.
La aprobación se dio en medio de violentos enfrentamientos entre las fuerzas de seguridad y manifestantes de distintas organizaciones sociales y políticas de izquierda que protestaban contra las reformas. Hubo heridos, detenidos, gases lacrimógenos y autos incendiados en las inmediaciones del Congreso.
El primer proyecto, conocido como Ley Bases, declara la emergencia pública en materia administrativa, económica, financiera y energética por un año. Esto faculta al Poder Ejecutivo a arrogarse poderes especiales en estas áreas e incluye incentivos a las grandes inversiones por 30 años, como facilidades para la explotación de recursos naturales y transferencias de ganancias al exterior.
Sin embargo, el oficialismo aceptó excluir a Aerolíneas Argentinas, el Correo Argentino y medios públicos de la lista de empresas estatales que pueden ser privatizadas. Además, se retiró un capítulo que eliminaba una moratoria previsional para trabajadores sin los 30 años de aportes requeridos.
Respecto del paquete fiscal, los senadores rechazaron un capítulo que contemplaba el restablecimiento de un impuesto a los salarios para miles de trabajadores, que el gobierno necesitaba para recomponer los ingresos fiscales.
Milei, un economista libertario que busca limitar la intervención del Estado, ha enfrentado la resistencia de la oposición, sobre todo del kirchnerismo, el sector del peronismo de centroizquierda que gobernó gran parte de los últimos 20 años.
Debido a que está en clara desventaja en el Senado, con sólo 7 de los 72 senadores, La Libertad Avanza tuvo que ceder en sus objetivos originales durante las negociaciones.
Ambas iniciativas serán giradas ahora a la Cámara de Diputados y, de aprobarse, serán las primeras leyes de Milei desde que llegó a la presidencia. El mandatario celebró lo que calificó como la «reforma legislativa más ambiciosa de los últimos 40 años».
En un foro económico, Milei advirtió que tiene «3.200 reformas estructurales más para enviar» si no las aprueban ahora. El gobierno espera que estas iniciativas impulsen la economía en recesión y con una inflación superior al 200% anual.
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