En un giro inesperado, el gobierno peruano ha decidido revocar su reciente medida que exigía a los ciudadanos mexicanos obtener una visa para ingresar al país con fines turísticos. Esta decisión busca salvaguardar el flujo de visitantes mexicanos, quienes representan un importante mercado para el sector turístico local.
Hace apenas unas semanas, Perú había anunciado que implementaría el requisito de visa para los mexicanos a partir del 1 de mayo, argumentando inconsistencias en los motivos de viaje de algunos visitantes. Sin embargo, tras evaluar el impacto potencial en la industria turística, las autoridades peruanas optaron por dar marcha atrás.
Actualmente, los ciudadanos mexicanos pueden ingresar a Perú sin necesidad de visa por un periodo de hasta 183 días, siempre que el motivo sea turismo, visitas familiares o de negocios. Solo requieren presentar su pasaporte vigente por al menos 6 meses y llenar la Tarjeta Andina de Migración a su llegada.
Esta medida recíproca se alinea con la política migratoria de México, que desde hace años exonera de visa a los peruanos que viajan como turistas por un plazo máximo de 180 días. Ambos países buscan así facilitar el intercambio cultural y económico.
La revocación del visado ha sido bien recibida por el sector turístico peruano, que espera mantener el flujo de visitantes mexicanos, especialmente ahora que se reactivan los vuelos directos entre ambas naciones tras la pandemia. México es un mercado clave para destinos icónicos como Machu Picchu y la gastronomía peruana.
Con esta decisión, Perú reafirma su compromiso de fortalecer los lazos con México y promover un turismo accesible y mutuamente beneficioso. Los viajeros mexicanos podrán seguir disfrutando de las maravillas del país andino sin trámites adicionales.
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