El Gobierno de Israel, liderado por el primer ministro Benjamin Netanyahu, ha accedido a la presión de la comunidad internacional, especialmente de Estados Unidos, para autorizar la entrada de ayuda humanitaria a Gaza por medio de un segundo paso. Esta decisión es un cambio significativo en la postura israelí tras el inicio del conflicto con Hamas el 7 de octubre, que ha dejado un saldo devastador de muertes y destrucción.
El Conflicto: Inicio y Desarrollo
El conflicto entre Israel y Hamas, el grupo islamista palestino en el poder en Gaza desde 2007 y considerado organización terrorista por Estados Unidos, la Unión Europea e Israel, comenzó con un ataque sin precedentes de Hamas en suelo israelí, matando a unas 1,200 personas. Israel respondió con una promesa de «aniquilar» a Hamas, desencadenando ataques aéreos y terrestres que han resultado en más de 18,700 muertes en Gaza.
La Crisis Humanitaria en Gaza
La ofensiva israelí ha sumido a la Franja de Gaza en una profunda crisis humanitaria. Según la ONU, 1.9 millones de habitantes, aproximadamente el 85% de su población, han sido desplazados, enfrentando una escasez aguda de alimentos, agua y electricidad. Las organizaciones humanitarias, como Médicos Sin Fronteras, han descrito la situación en la Franja como «inhabitable».
La Presión Internacional y la Respuesta de Israel
Ante la creciente presión internacional y las crecientes bajas civiles, Israel ha accedido a permitir la entrada de ayuda humanitaria a través del paso de Kerem Shalom, ubicado en la frontera entre Egipto e Israel. Esta medida busca aliviar la congestión en el paso de Rafah y duplicar la cantidad de ayuda que entra en Gaza. El gobierno israelí ha prometido permitir el ingreso de 200 camiones al día con alimentos y suministros, en cumplimiento de un acuerdo con Estados Unidos.
El Rol de Estados Unidos y el Futuro del Conflicto
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha jugado un papel crucial, instando a Israel a centrarse en salvar vidas civiles y reducir la intensidad de sus operaciones militares. La Casa Blanca ha expresado su deseo de que Israel no ocupe Gaza a largo plazo una vez que termine el conflicto. Sin embargo, el ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, advierte que la guerra podría durar «más que varios meses», a pesar de los deseos de Estados Unidos.
Esta decisión de Israel de abrir un nuevo paso para la ayuda humanitaria a Gaza, aunque temporal, es un paso significativo hacia el alivio de la grave crisis humanitaria en la Franja. Sin embargo, la solución a largo plazo del conflicto sigue siendo incierta, con posiciones firmes tanto de Israel como de Hamas y la creciente preocupación de la comunidad internacional por el bienestar de los civiles en Gaza.
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