El huracán Milton dejó una estela de destrucción a su paso por Florida, cobrando la vida de al menos 16 personas y dejando a millones sin electricidad. El fenómeno meteorológico tocó tierra el miércoles por la noche como una tormenta de categoría 3, azotando comunidades que aún se recuperaban del reciente paso del huracán Helene hace apenas dos semanas.
Las autoridades informaron que la cifra de víctimas mortales aumentó a 16 este viernes, mientras los residentes comienzan el arduo proceso de reconstrucción. Casi 2.5 millones de hogares y empresas permanecían sin suministro eléctrico, y algunas zonas devastadas por la tormenta seguían inundadas. Los tornados relacionados con Milton parecen haber causado más muertes que las inundaciones, con al menos cuatro personas fallecidas en Fort Pierce debido a un tornado generado por el huracán.
El gobernador Ron DeSantis declaró que, aunque la tormenta fue significativa, afortunadamente Florida pudo evitar el nivel de devastación catastrófica que se temía inicialmente. Sin embargo, las pérdidas aseguradas por el huracán Milton podrían oscilar entre 30.000 y 60.000 millones de dólares, según estimaciones del analista de Morningstar DBRS Marcos Alvarez. Otros analistas sugieren que las cifras podrían alcanzar los 100.000 millones de dólares, considerando que Milton fue el quinto huracán más intenso del Atlántico registrado.
La tragedia ha avivado la campaña presidencial en Estados Unidos, con el expresidente Donald Trump y la vicepresidenta Kamala Harris intercambiando acusaciones sobre la gestión de los esfuerzos de recuperación. La Casa Blanca ha prometido apoyo gubernamental, mientras Trump critica la respuesta del gobierno federal, particularmente en Carolina del Norte. Harris, por su parte, ha acusado a Trump de difundir mentiras sobre la respuesta gubernamental y lamentó la politización del tema en medio de la crisis.
A medida que avanzan las labores de limpieza y reconstrucción, que podrían llevar semanas o incluso meses, los residentes de Florida enfrentan el desafío de recuperarse de este segundo golpe en menos de un mes. Las autoridades continúan evaluando los daños y realizando operaciones de rescate en las zonas más afectadas, mientras la población se prepara para un largo proceso de recuperación y adaptación frente a la creciente amenaza de fenómenos meteorológicos extremos.
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