Cuatro hombres acusados de perpetrar el mortífero ataque terrorista en una sala de conciertos de Moscú, que dejó más de 130 víctimas fatales, comparecieron ante la Corte del Distrito Basmanny de la capital rusa el pasado domingo.
Los sospechosos, identificados como Dalerdzhon Mirzoyev (32 años), Saidakrami Rachabalizoda (30), Shamsidin Fariduni (25) y Mukhammadsobir Faizov (19), enfrentaron cargos formales de cometer un «atentado terrorista grupal que derivó en la muerte de otras personas».
Durante la audiencia preliminar, dos de los acusados admitieron su culpabilidad en el ataque, aunque las señales de golpes visibles en ellos generaron interrogantes sobre si se expresaban libremente.
El atentado, reivindicado por una filial del grupo Estado Islámico, tuvo lugar el viernes en la sala Crocus City Hall y se convirtió en el más mortífero en suelo ruso en años. Según informes, los atacantes utilizaron fusiles automáticos, pistolas, cuchillos y bombas incendiarias.
Mientras Rusia guardaba un día de luto nacional, los equipos de rescate continuaban inspeccionando el recinto dañado en busca de más víctimas. El Departamento de Salud de Moscú informó que el proceso de identificación de los cuerpos mediante análisis de ADN tomará al menos dos semanas.
Este trágico suceso ha conmocionado a la nación rusa y ha puesto en alerta a las autoridades ante la amenaza del terrorismo internacional. Se espera que el juicio contra los acusados arroje luz sobre los detalles del ataque y las motivaciones detrás de este acto violento.
Deja una respuesta