La jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Clara Brugada, anunció una inversión de 25 mil millones de pesos para 2026 destinada a la rehabilitación y modernización del Metro, con énfasis en las Líneas 3, 12 y A, así como en el fortalecimiento de la seguridad operativa y la capacitación del personal. El objetivo central es mejorar la confiabilidad del servicio, reducir fallas y modernizar trenes e instalaciones estratégicas en uno de los sistemas de transporte más utilizados del país.
Brugada detalló que una parte sustantiva de los 25 mmdp se canalizará a la renovación integral de vía, pilotaje automático, sistemas eléctricos y equipos de señalización en las Líneas 3, 12 y A, consideradas prioritarias por su alta afluencia y por el historial de incidencias técnicas. La funcionaria subrayó que estos trabajos se suman a la reciente modernización de la Línea 1, y forman parte de un plan de mediano plazo para actualizar la infraestructura crítica del STC Metro.
En paralelo a la inversión en obra dura, el Gobierno capitalino entregó al Metro nuevos simuladores de conducción para la Línea 1, con los que se busca reforzar la capacitación de conductores y reducir el riesgo de accidentes en las vías. Los equipos permiten recrear fallas de tren, variaciones de velocidad, cambios de señalización y situaciones de emergencia, lo que da al personal operativo herramientas de entrenamiento más realistas y seguras.
La administración local también informó la adquisición de nuevos vehículos auxiliares y unidades de mantenimiento para atender incidencias en túneles y zonas de difícil acceso, en especial en tramos subterráneos de alta demanda. Con ello se pretende acortar tiempos de respuesta ante fallas, revisar más tramos de vía y garantizar mejores condiciones de operación diaria, en beneficio de millones de usuarios que dependen del sistema para desplazarse.
Brugada insistió en que el Metro es un “eje de movilidad y de justicia social” para la ciudad y aseguró que la inversión anunciada para 2026 representa un compromiso de largo plazo con la seguridad, la modernización tecnológica y la calidad del servicio. El programa contempla que las intervenciones se realicen de forma escalonada para minimizar afectaciones al público, con la promesa de informar con anticipación sobre posibles cierres parciales o ajustes de operación en las líneas intervenidas.
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