Cada 4 de noviembre se celebra el Día de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), una fecha que recuerda la importancia de fortalecer el conocimiento, la cooperación internacional y los valores que nos unen como humanidad. Esta institución nació en 1945, tras la Segunda Guerra Mundial, con la firme convicción de que la paz no puede sostenerse solo con acuerdos políticos, sino con el entendimiento entre los pueblos.
Un legado que promueve el desarrollo humano
La UNESCO trabaja en más de 190 países con una misión clara: fomentar la educación, la ciencia, la cultura y la comunicación como pilares del desarrollo sostenible. Su objetivo es que todas las personas, sin importar su origen, tengan acceso a una educación de calidad y puedan vivir en sociedades más justas, inclusivas y solidarias.
En México, la UNAM ha sido un actor clave en esta historia. Desde hace décadas, colabora estrechamente con la UNESCO en la generación de conocimiento, la formación de investigadores y la defensa del patrimonio cultural. Gracias a esta alianza, se han impulsado programas que promueven la alfabetización, la conservación del patrimonio y el diálogo intercultural.
Educación y cultura: armas para la paz
La educación es el corazón de la UNESCO, pues se considera la herramienta más poderosa para transformar el mundo. Desde su fundación, ha impulsado proyectos que permiten que millones de personas aprendan a leer y escribir, fomentando también la igualdad de género, la inclusión y la sostenibilidad ambiental.
En el terreno cultural, la organización ha protegido miles de sitios considerados Patrimonio Mundial de la Humanidad, desde monumentos históricos hasta expresiones vivas como la gastronomía o las tradiciones populares. México, por ejemplo, cuenta con 35 sitios reconocidos por la UNESCO, entre ellos Teotihuacán, Chichén Itzá, Xochimilco y el Centro Histórico de la Ciudad de México.
Ciencia y comunicación: claves del futuro
Otro de los ejes de la UNESCO es el impulso a la ciencia y la tecnología con enfoque humano. Promueve la investigación científica al servicio del bien común, especialmente en temas como cambio climático, acceso al agua, inteligencia artificial y biodiversidad. Además, defiende la libertad de expresión y el acceso a la información, considerándolos esenciales para construir sociedades democráticas y participativas.
México y la UNESCO: una relación de cooperación
Nuestro país mantiene una relación sólida con la UNESCO desde 1947. A lo largo del tiempo, ha recibido reconocimientos por su riqueza cultural, sus aportes en materia educativa y su compromiso con la preservación de la memoria histórica. Instituciones como la UNAM, el INAH y la SEP colaboran constantemente con la organización para promover una cultura de paz y conocimiento.
Un llamado a valorar el saber
En un contexto global donde abundan los conflictos y las desigualdades, el mensaje del Día de la UNESCO cobra especial relevancia: invertir en educación, ciencia y cultura es invertir en un futuro mejor para todos. La conmemoración invita a reflexionar sobre cómo cada ciudadano puede contribuir desde su entorno a la construcción de un mundo más equitativo, informado y respetuoso.


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